¿Superará el marketing de contenidos la crisis que se avecina?


Aunque no nos lo hayan contado, la crisis económica está a punto de convertirse en realidad. La Unión Europea no le dará a España 20 000 millones de euros de fondos europeos en los próximos dos años, los pactos para atornillar al presidente a su sillón implicarían que los independentistas no abonasen 70 000 millones y el aumento del IPC supondrá un aumento de 7000 millones de euros de coste para una Seguridad Social diezmada por una industria política que nos cuesta 150 000 millones al año.


Como es lógico, lo que falta lo vamos a poner nosotros gracias a nuevos impuestos que contribuirán a que el cierre de negocios aumente considerablemente. Se espera que de los 250 que cierran para siempre al final de cada jornada se pase a unos 350 o 400. El tejido económico, los autónomos y quienes luchan por la viabilidad de su idea lo vamos a tener más complicado que nunca.

En el otro plato de la balanza se encuentra el cliente final que también tendrá menos dinero en el bolsillo, lo que se traducirá en una reducción del gasto y en la búsqueda permanente de precios bajos, pero sin que el servicio se altere demasiado.

Lamentamos ser tan pesimistas, pero es la realidad que vamos a vivir en esta recta final de año y a lo largo de 2024. Los recursos a mano de los emprendedores y empresarios son múltiples, pero hay uno que no debería olvidarse: el marketing de contenidos.

Quizá sea conveniente dejar un poco las campañas dirigidas a la venta directa y centrarse más en la explicación detallada de un servicio o producto. Este matiz marca la diferencia y permite que el cliente decida invertir su dinero en algo que presenta diversas ventajas frente a un artículo o propuesta de la competencia.

Al mismo tiempo, se estará consiguiendo el objetivo de la especialización en un sector y de convertirse en una fuente de consulta obligada para cualquier interesado/a en una oferta comercial de calidad. De hecho, vamos a comprobar cómo este tipo de contenidos se adaptará también a la situación, como sucedió cuando estalló la pandemia, y mostrará que también los propietarios de una empresa están sufriendo una situación dura de la que se saldrá cuando haya cambios económicos o políticos.

Por lo tanto, invertir en contenidos seguirá siendo una estrategia adecuada para generar tráfico orgánico, mantener el posicionamiento en los buscadores y conseguir que los clientes mantengan el compromiso con la propuesta correspondiente. Crucemos los dedos, recemos lo que sepamos y apretemos los dientes para que la crisis pase lo antes posible.

Imagen: Marcus Winkler para Unsplash.

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